Carmen Domínguez. En “Tiempo de Caramelos” no solo son dulce los caramelos sino también los dueños. Es una joven pareja venezolana que llegó a nuestra patria hace poco. Exactamente ella vino hace 5 años y él 3. Se conocieron en su país y eran buenos amigos pero cuando se reencontraron en España brotó la chispa del amor y se casaron.
Marion es profesora de inglés en una academia y Oscar trabaja en una gestoría como contable. Tenían un sueño, ser propietarios de un negocio, y lo cumplieron. Se hicieron con “Tiempo de Caramelos”. Aunque con el margen que dan las golosinas es difícil sobrevivir, con ingenio, lo han conseguido. Él trabaja por la mañana y ella por la tarde, así pueden turnarse en la tienda.
Toda actividad tiene sus particularidades y los dulces no escapan a esta regla. Me han contado que su clientela, siendo mayoritariamente de niños, tiene también otras peculiaridades. Los adultos son buenos consumidores de estas delicias pero, en general, las adquieren sin azúcar.
Los críos usualmente se comportan, aunque eso no quiere decir, que hay algunos pillos que distraen ciertas chuches en el bolsillo para no pasar por caja. Esto es una travesura que hay que corregir con mucho tacto y psicología. Nuestro dúo desempeña esta función con mucha eficacia y dulzura.
Los viernes es el día que más venden ya que es cuando los papas dan la paga a sus hijos. Las golosinas preferidas de los chavales son las que llevan alguna sorpresa dentro. A veces el público infantil desconcierta con sus preguntas francas e inocentes: como el día que un chico de corta edad no dejaba de inquirir a Oscar si tenía novia y quien era; por más que él quería desviar la conversación hacia otro tema el pequeño insistía en su curiosidad. En este mundo de bombones, niños y adultos golosos, nuestros amigos se desenvuelven con suma habilidad.
En fin, es una tienda pequeñita pero con un gran mundo interior meloso y cálido como sus dueños, con sus francas sonrisas y desbordante juventud. Nosotros, desde aquí, deseamos que siempre haya azúcar y buenas sorpresas en la vida de nuestros protagonistas de hoy.